Si alguien nos hubiera dicho que a principios de 2020 acabaríamos trabajando desde casa seguramente no lo hubiéramos creído. Pero con todos los eventos que llevamos sucediendo durante los últimos meses, muchos de nosotros nos encontramos en esta nueva situación que, quién sabe, tal vez termina siendo permanente. Pero no todo son malas noticias durante este año, ya que el teletrabajo aporta una serie de beneficios en nuestro día a día de los que no disfrutamos antes, tanto por los trabajadores como para las empresas.
- Equilibrio entre la vida laboral y familiar: Los empleados que teletrabajan pueden organizarse mejor el tiempo, a la vez que pueden no tener tantas distracciones como en una oficina. Es decir, pueden lograr más en menos tiempo. Esto permite tener más tiempo durante el día para llevar a cabo tareas personales, lo que en muchos casos no les era posible trabajando en una oficina. Este tiempo «extra» ayuda a equilibrar la vida laboral y familiar, lo que aumenta la felicidad y la productividad de los empleados.
- Más flexibilidad horaria: Los horarios flexibles son unos de los mayores beneficios del teletrabajo. Los empleados tienen la oportunidad de crear un calendario y una agenda propios, y adaptado a su estilo de productividad. Si alguien decide dormir un rato más y empezar a trabajar más tarde, lo pueden hacer. Y si por algún motivo les gusta trabajar de noche, pueden terminar el trabajo mientras el resto está durmiendo. En lugar de saltarse horas de trabajo o perder horas en una oficina, los empleados pueden hacer el trabajo necesario cuando les es más conveniente.
- Reducción de costes (para la empresa): El teletrabajo implica que habrá menos empleados en la oficina. Este hecho puede hacer posible reducir el espacio de trabajo, es decir, tener una oficina más pequeña. Aunque el equipo crezca, uno no tendrá que preocuparse por el espacio disponible en una oficina. Dado que los alquileres van subiendo año a año, estos costes se verán reducidos para la empresa, y se podrán destinar a otros menesteres de mayor importancia.
- Reducción de gastos (para el empleado): Teletrabajar no implica sólo beneficios para la empresa, sino también para sus empleados. El ahorro en gasolina, transporte público, comidas, ropa de trabajo, estacionamiento … Ayuda al empleado poder ahorrar de una manera más efectiva. Menos gastos implican que su salario no se verá tanto reducido a finales de mes.
- Facilidad en concentrarse: Como hemos mencionado anteriormente, al no haber compañeros de trabajo que nos distraigan, el empleado puede concentrarse más en sus tareas. Sin estas distracciones, seguramente también harán un mejor trabajo ya que su atención estará centrada en el trabajo.
- Teletrabajo puede ser el futuro del trabajo: El teletrabajo puede convertirse en un estilo de vida para muchos de nosotros si sabemos organizarnos y adaptarnos a esta nueva realidad. Puede hacer que seamos más eficientes, más productivos y más felices, y presenta beneficios que quizás no habíamos previsto hasta que nos hemos encontrado.